Why are Mexicans so Religious?

PORQUE LOS MEXICANOS SON TAN DEVOTOS

Disertar sobre porque los mexicanos son tan devotos, es un tema muy complejo, porque involucra muchos diferentes aspectos, pero trataré de darles una idea en general. Después de que los conquistadores españoles saquearon la capital Azteca de Tenochtitlan en 1521, los primeros años de la conquista española fue brutal.

Los españoles no solo forzaron a los nativos a la esclavitud, desintegraron familias separándolas, y mataron a quien se resistía. Esto inicio un ciclo de resistencia indígena y violencia española. Los nativos también vieron morir a cientos de personas en sus comunidades por las diferentes enfermedades que trajeron los
españoles, debido a que su sistema inmunológico no estaba preparado para resistir enfermedades desconocidas.

Los españoles buscaban dos conquistas, la militarizada, para tener completo control español del territorio y la conquista espiritual, al convertir a los nativos a la cristiandad. Por otro lado, los españoles estaban horrorizados por los rituales de sacrificio humano que se llevaban a cabo y trataron de suprimirlos de cualquier manera, condición que no se logro hasta que el imperio Azteca estuvo bajo el total dominio de los conquistadores.

La conversión de los nativos fue una negociación que mezclo elementos de la religión azteca y el catolicismo. Por ejemplo, ambos lados tenían una jerarquía sacerdotal con estructura similar y compartían símbolos y rituales. Los aztecas y los españoles imponían nuevos dioses a los pueblos conquistados.

Sin embargo, los misioneros católicos se frustraban al encontrar imágenes de la Virgen María y de Jesús, juntos con los dioses aztecas.

1 Comment

  1. Very informative and interesting as usual.
    I think the Spanish introducing European diseases contributed to the conquest more than is usually depicted.
    I especially enjoy your emphasis on churches which demonstrate indigenous symbols.
    I visited a church whose angels had their wings springing from their arms, an indigenous expression rather than the typical Catholic expression.
    Thanks for introducing me to your wonderful website.
    Jim Merrell

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